Sal Marina

Se recolecta, como antaño, en los charcos sobre rocas que se llenaban durante la pleamar. Pero de las más de 50 salinas que había en las Islas desde el s. XVI, la mayoría para abastecer a la industria pesquera y sus salazones, actualmente existen nueve, cinco de ellas en Gran Canaria. Sus características principales son el carácter intensivo, los tajos pequeños y la decena de producciones que dan al año, gracias a las condiciones naturales inigualables de la isla. La sal marina de Gran Canaria es fresca, menos concentrada, sin sabor amargo y con los oligoelementos correspondientes. Esta maravillosa sal tiene como destino hoy satisfacer al mercado natural y, especialmente, a la gastronomía.