Dejamos los garbanzos a mojo en agua templada con sal desde el día anterior.
Al día siguiente cambiamos de agua y los ponemos a cocer en un puchero con abundante agua fría
Añadimos la cebolla, la zanahoria , el puerro y media hoja de laurel y dejamos cocer lentamente.
Mientras tanto cocemos la espinaca en cazuela aparte, escurrimos y reservamos.
Cocemos los huevos, los pelamos y en un mortero machacamos las yemas desleídas en un poco de caldo y reservamos.
En una sartén con aceite de oliva virgen extra doramos ligeramente el bacalao en tacos pequeños y reservamos. En el mismo aceite doramos un par de ajos, pochamos cebolla picada junto al tomate pelado y despipado.
Cocidos los garbanzos retiramos la cebolla y el puerro. Cortamos en rodajas la zanahoria para añadir al guiso.
Para terminar incorporamos a la cazuela las espinacas cocidas, las yemas machacadas, el bacalao y el sofrito, removemos con cuidado y añadimos las claras de huevo picadas.
Antes de servir rectificamos de sal y dejamos cocer todo junto cinco minutos más, debemos procurar que este guiso nos quede caldoso.
Para 4 personas: