Operación crustáceo: conexión Atlántico y Mediterráneo

En el marco de la campaña «Saborea España: ¡Como te cuidas!», que destaca la importancia de cuidar el producto, el talento gastronómico y el territorio, Vinaròs y Lanzarote emergen como verdaderos tesoros de la gastronomía española. Estas dos localidades no solo ofrecen productos de calidad inigualable, sino que también representan la tradición y el respeto por la naturaleza que define la cocina española.

Vinaròs: El Langostino que conquista paladares

Vinaròs, ubicada en la Comunidad Valenciana, es famosa por su langostino, un producto que se ha convertido en un emblema de la región. El langostino de Vinaròs destaca no solo por su sabor único, influenciado por las aguas del Delta del Ebro, sino también por su textura y frescura, características que lo diferencian de otros mariscos. Este marisco, cocido en agua de mar, ofrece una experiencia culinaria pura que deleita a quien lo prueba.

Además, el compromiso de Vinaròs con la sostenibilidad y el aprovechamiento total del producto es un ejemplo a seguir en la gastronomía. Desde la lonja hasta el plato, cada langostino es tratado con el máximo respeto, destacando así la importancia de cuidar el producto.

Lanzarote: El Carabinero, la sorpresa del atlántico

Por su parte, Lanzarote, una isla volcánica en las Canarias, ha sorprendido al mundo gastronómico con su carabinero, un marisco capturado a más de 1000 metros de profundidad. Este descubrimiento relativamente reciente ha puesto a Lanzarote en el mapa culinario nacional, gracias a la intensidad de sabor y la riqueza nutricional de este crustáceo.

La cocina conejera es una representación clara del cuidado del territorio, donde los productos autóctonos como la cebolla y las algas marinas juegan un papel esencial en la creación de platos que narran la historia de supervivencia y adaptación de la isla.

Vinaròs y Lanzarote ejemplos de talento gastronómico

El talento gastronómico de ambas regiones es incuestionable. Los chefs de Vinaròs y Lanzarote no solo dominan la técnica, sino que también comprenden profundamente el valor de sus ingredientes locales, logrando así platos que son verdaderas obras de arte culinario.

La campaña «Saborea España: ¡Como te cuidas!» resalta la importancia de cuidar el producto, el talento y el territorio. Vinaròs y Lanzarote son claros ejemplos de cómo el respeto por estas tres áreas puede elevar a una región a convertirse en un referente gastronómico nacional. Langostino de Vinaròs y Carabinero de Lanzarote son solo la punta del iceberg de lo que España tiene para ofrecer al mundo en términos de gastronomía y productos de calidad.