Burgos está situada geográficamente en norte de España, en el eje comercial Norte- Sur de Europa a medio camino desde de la frontera con Francia y la capital de España. El centro de la ciudad mantiene un destacado conjunto artístico y monumental formado por la Catedral —Patrimonio Mundial UNESCO—, un casco histórico protegido y edificios que se mantienen intactos con el paso del tiempo como el monasterio cisterciense de Las Huelgas y la Cartuja de Miraflores.
Una histórica ciudad que ha sabido mantener el patrimonio y la cultura de los tiempos pasados, influenciada por los miles de viajeros venidos de diferentes partes del mundo y que han dejado su huella gracias a que Burgos ha resultado ser parada imprescindible en el recorrido del Camino de Santiago.
Gracias a la proximidad de Burgos a los Yacimientos de la sierra de Atapuerca, a tan sólo 15 km, convierte a la ciudad en referente para el estudio de la evolución humana, como lo reconoció la UNESCO, con la declaración de Patrimonio Mundial de este sitio arqueológico en el año 2000.
Debido a su geografía, con gran variedad de climas y altitudes, la provincia de Burgos genera gran abundancia de productos diversos, derivados de su cuidada agricultura, ganadería y el mantenimiento de costumbres como la caza y la pesca.
Burgos goza además de una reconocida gastronomía que lleva su apellido por toda España, como la morcilla y el queso, los más populares, y de las que se pueden disfrutar además de diferentes variedades autóctonas. Junto con ellos el lechazo, asados y pucheros atraen cada vez más adeptos a las cocinas de los restaurantes de la ciudad.
En la capital se pueden degustar productos de toda la geografía burgalesa junto con el pan y el vino como alimentos esenciales. En Burgos la torta de Aranda es un manjar, regada con los vinos denominación de origen de Arlanza o Ribera del Duero, dos comarcas vitivinícolas consolidadas en los mercados nacionales e internacionales. Ambas cuentan con el control y garantía de sus denominaciones de origen correspondientes.
A esta oferta gastronómica se suma una cocina en miniatura que elaboran restaurantes, bares, cafeterías, tabernas y mesones que nos tientan en sus barras con una atractiva selección de tapas, pinchos, raciones o cazuelitas. Sobrada justificación para una sabrosa escapada gastronómica.