RUTA DE LA GASTRONOMÍA CLÁSICA

Por fortuna, nuestra ciudad todavía atesora ejemplos evolucionados de las tabernas, abacerías y tiendas de ultramarinos (porque traían alimentos de ultramar) que dieron origen a muchos de nuestros bares más clásicos.

 

Junto a estos, los bares de ambiente cofrade o taurino, son otras de las referencias de nuestra oferta más genuina. Muchos de ellos son locales frecuentados por los hermanos de las cofradías ubicadas en iglesias cercanas o, en su caso, lugares de encuentro para los aficionados a la tauromaquia (en el Barrio del Arenal, cerca de la Plaza de Toros de la Maestranza, encontrarás algunos ejemplos).

 

Su cocina la podrás disfrutar en formato tapa o plato para compartir, o incluso , en papel de estraza. Especialidades como: la carrillada, el solomillo al whisky, las “papas aliñás”, la ensaladilla, las espinacas con garbanzos, los caracoles, el arroz del día, los embutidos y carnes ibéricas, el menudo sevillano, la cola de toro, la carne con tomate, el chipirón plancha, las croquetas, la pavías de bacalao o merluza, los “montaíto de pringá”, el serranito, los salazones y encurtidos son buenas opciones.

 

Si nos visitas durante la Cuaresma, te recomendamos que disfrutes de la cocina de la época, los guisos a base de vegetales y legumbres y el bacalao son los grandes protagonistas. Si en cambio, llegas en verano, te sugerimos que pruebes el gazpacho, quizás la bebida más isotónica y refrescante de todo el recetario español.

 

Pero, sobre todo, nuestro mejor consejo es que disfrutes del ambiente, comer en estos locales es una estupenda manera de conocer mejor nuestra cultura y nuestro estilo de vida.

Importante: Consulte los horarios y días de apertura de los establecimientos de manera previa a la visita puesto que están sufriendo muchas alteraciones por la actual situación sanitaria.